Cinco ciencias del comportamiento que pueden ayudarlo a comprender la naturaleza fundamental de sus estudiantes jóvenes

Cinco ciencias del comportamiento que pueden ayudarlo a comprender la naturaleza fundamental de sus estudiantes jóvenes

  1. Comprenda que todo comportamiento tiene una intención positiva y es un signo de la individualidad del niño. A veces, los niños pueden actuar de manera extraña o fuera de los límites durante la clase solo porque simplemente están encontrando su propio camino. Muchos profesores tienen una percepción distorsionada de un comportamiento extraño o agresivo. No asuma que los comportamientos extraños o agresivos son signos de negatividad. Si se enseña a abordar cada comportamiento como una señal de la individualidad del niño y lo trata con un enfoque positivo, se sorprenderá del resultado que encontrará. Después de todo, es la individualidad de cada niño lo que hace que la enseñanza sea divertida.

  1. Ayude a sus hijos a descubrir que no existe el fracaso, solo la retroalimentación. Como maestros, nuestro papel es nutrir a todos y cada uno de los estudiantes y ayudarlos a crecer. Cuando un niño comete un error, no es nada malo. Los errores son la forma en que aprenden los niños, y si les ayuda a comprender que los errores no significan fracasos, mejorará su crecimiento general. No existe el fracaso si sabe cómo dar una retroalimentación positiva y constructiva cuando sea necesario.

  1. No puedes “no” comunicarte. Es curioso ver a los profesores que no se conectan directamente con los niños a los que están enseñando. Es prácticamente imposible comunicarse con un niño si no sabe cómo conectarse con él. Para mejorar sus habilidades de enseñanza con los niños, tenga en cuenta que la comunicación se transmite no solo por el lenguaje, sino también por la voz, el tono y la postura. Cada movimiento y cada ruido que haces transmite un mensaje. Elija las palabras, los tonos y los movimientos correctos y sus habilidades de comunicación y enseñanza tendrán un impacto positivo y poderoso.

  1. La acción de un niño no convierte al niño. Es natural que un maestro se sienta desanimado con los niños que no se comportan adecuadamente. El problema es que muchos maestros culpan al niño como si fuera una amenaza, pero en realidad no es el niño, sino el comportamiento que eligió el niño, el verdadero problema. En lugar de decirle a un niño “eres un niño malo porque le pegaste”, intenta decirle algo como “tu decisión de pegarle no fue la correcta”. Aprenda a separar el comportamiento del niño para que el niño no sienta que usted piensa que es una mala persona.

  1. TODOS tienen la capacidad de triunfar. Cuando miras a algunas de las personas más importantes de la historia, como Albert Einstein y Thomas Edison, nunca sabrías que ambos tenían problemas de aprendizaje. La razón por la que lo lograron es porque ambos, a pesar de sus problemas, utilizaron todos sus recursos para lograr sus sueños. Ser consciente del hecho de que los niños pueden tener éxito si simplemente cree en ellos hará una gran diferencia. Dé a sus estudiantes con dificultades más amor y apoyo y los ayudará a darse cuenta de que tienen más potencial del que pensaban.